Introducción
El fenómeno de la migración venezolana de años recientes ha resultado complejo de estudiar debido a una conjunción de factores entre los cuales se destacan la falta de datos fiables y actualizados, la perturbación generada por las sensibilidades políticas que se agitan en torno al tema, pero sobre todo por su gran dinamismo y complejidad. A cada observación pueden surgir interpretaciones contrapuestas que constituyen un serio desafío metodológico.
A falta de fuentes de datos y de una masa crítica de estudios sobre el tema, nos toca analizar de lo que disponemos: declaraciones de autoridades, información de prensa y datos de la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V) y en menor medida los últimos datos publicados por la División de Población de Naciones Unidas.
La pregunta que nos hacemos es cuáles son los cambios que se pueden identificar en relación con las magnitudes del fenómeno, los flujos de migración, las decisiones en materia de permanencia, exigencia de visas, regularización, etc., sobre todo en países del continente americano, que son los que han experimentado el proceso en mayor medida.
Asimismo, dado el dinamismo observado hasta el momento, también nos permitimos plantear algunos escenarios sobre la base del análisis del actual contexto mundial, signado por crisis económicas y tensiones geopolíticas que pudieran achicar el margen de maniobra de las personas venezolanas migrantes en países americanos y europeos, que aunado al incipiente proceso de recuperación de la economía venezolana pudieran dar un impulso al flujo de retorno que ya se ha venido observando desde 2020, mientras que sigue disminuyendo el número de nuevos desplazamientos migratorios desde Venezuela.
Este artículo forma parte de una línea de investigación que venimos trabajando desde el año 2019 sobre la migración venezolana, a través de la cual hemos tratado de brindar una mirada desprejuiciada y objetiva del fenómeno, poniendo especial cuidado de no admitir interpretaciones políticamente interesadas, y poner por delante los derechos humanos de la población migrante.